Fue encontrado junto con su hermano en un pueblo de Granada. Al echarles algo de comida vieron que Brown tenía una gran herida en el cuello, creemos que algún cazador intentó ahorcarlo. Es un perro muy sumiso y muy tranquilo cuando está en la casa, como buen cachorro en la calle le encanta correr y jugar. La herida la tiene muy bien poco a poco se ha ido cerrando y esperan que con las ultimas curas en pocos días la tenga cerrada del todo.