Fue tirada por encima de la valla de nuestro refugio y allí sigue esperando un hogar. Tiene mucha fuerza y energía, siempre está correteando, le encanta que le tires algún palo y nunca se cansa de ir a por el y traértelo sin importar por cuanto tiempo lo hagas. Necesita alguien con experiencia y que sepa educarla. Tiene obsesión por el agua, le encanta jugar en ella y siempre se pone como una loca en cuanto ve que puede jugar con el chorro de alguna manguera. A pesar de ser tan nerviosa y activa, nunca tiene problemas con otros perros y es muy cariñosa con las personas. Siempre te buscará para jugar y recibir tus caricias.